En esta ocasión les traigo una nueva entrega de la saga "Peashy Master Race", pero en esta ocasión si indagaré un poco más en el pasado y nos asomaremos a finales del milenio pasado.
Hace algunos meses mi amigo MagmaD me cedió una laptop. Se trata de una Compaq Presario 2510LA, la cual es una laptop que pesa alrededor de 4 kilos, por lo que transportarla representa un buen ejercicio. De línea esas laptops traen 256MB de RAM DDR, disco duro de 40GB y un procesador Pentium 4. La que me cedieron venía equipada con 1GB de RAM (un incremento notable), un disco duro de 20GB y un procesador Pentium 4 SL6DX núcleo Northwood con unos increíbles 66W de TDP (excesivo para una laptop, pues es un procesador pensado para computadoras de escritorio).
La idea de obtener esa laptop fue buscar un reemplazo para la querida Toshiba T4700CT, una laptop que me cedió Dash Bandit y que me sacó de apuros en más de una ocasión, pero que desgraciadamente ya está resintiendo el paso de las décadas. Si bien aún enciende, la parte derecha del teclado suele no responder, por lo que se dificulta demasiado su uso. Esto se magnifica debido a que sus sistemas operativos son DOS (que se emplea exclusivamente con teclado) y Windows 3.1. Además de que no cuento con un mouse con conexión serial RS232 que me facilite su uso dentro del entorno Windows (MOUSE.COM hace locuras con los mouse de conexión PS/2), por lo que la falla en el teclado si la podemos calificar de "incapacitante". He tratado de buscar un reemplazo del teclado sin éxito en los sitios de subastas por Internet, e incluso si se le daba un poco de "masaje" al teclado a veces respondía de forma normal, pero al cabo del tiempo la falla se vuelvía a presentar. Desarmé el teclado, limpié a conciencia las teclas y los contactos de las membranas internas pero la falla en vez de arreglarse ha empeorado. Por si fuera poco la unidad floppy ya
Recientemente me puse a la labor de rescatar la información de esa venerable computadora y encontré que los adaptadores IDE44 a USB fracasaban miserablemente en su intento por reconocer el disco duro. Recurrí a conectar el disco duro con un adaptador IDE44 a IDE40 a una computadora de escritorio con interfaz IDE y el disco pudo ser reconocido por el BIOS. Traté de arrancar Linux Mint desde una USB para intentar hacer una imagen del disco duro (con el comando dd), pero Linux Mint se trababa en el arranque al tratar de iniciar los controladores para el disco duro (con varios mensajes de error de DMA y PIO antes de estrellarse de forma bastante vistosa y espectacular). Intenté con Windows XP (arrancando desde el disco interno de la computadora) y el sistema se quedaba colgado antes de la pantalla de bienvenida. La única forma en que pude acceder a la información del disco duro fue arrancar Windows XP en modo a prueba de fallos, lo cual me permitió ejecutar SCANDISK y DEFRAG en el disco, para posteriormente copiar toda la información y ponerla bajo resguardo.
Volviendo a la Presario 2510LA, es de resaltar que es una laptop con una arquitectura bastante buena, pues se siente extremadamente sólida (y pesada), cuenta con tres poderosos y ruidosos ventiladores que mantienen la temperatura del procesador bajo control. Los periféricos con los que cuenta son una pantalla de 15 pulgadas formato 4:3 (es decir "cuadrada") con una calidad de imagen muy buena (para su época). Trae una lectora de DVD (no quemadora), disquetera de 3.5 pulgadas (que no he probado si es funcional), un puerto de modem telefónico, un conector Firewire, tres puertos USB, conector PS/2 para ratón, salida VGA y SVideo, así como el siempre deseable (para las personas que desarrollamos hardware con ayuda de la computadora) puerto paralelo LPT. De forma curiosa no cuenta con puerto serial RS232, pero eso no es inconveniente ya que cuento con un cable adaptador USB a serial RS232 con chipset Prolific 2303 (que suelen ser sumamente baratos).
En cuestión de conexiones y periféricos esa computadora es sin lugar a dudas muy conveniente. Quizás su capacidad de cómputo ya no alcance para navegar con fluidez por el Internet moderno ni para ver videos de Youtube a la calidad más baja disponible (cosa que la netbook que empleo para escribir esta entrada tampoco logra hacer X_x), pero para otro tipo de tareas más especificas se le puede sacar mucho provecho. Ahora bien, esa laptop tiene muy buenos (y pesados) "huesos" pero también hay que considerar un sistema operativo que nos permita sacarle provecho de la forma más efectiva. La opción más natural es Windows XP (que es el sistema operativo que traía de fábrica) o alguna distribución Linux ligera (como Linux Mint MATE).
Pero como siempre, la opción que empleamos acá es siempre la que nos permita complicarnos la vida n_n. Además, se ocupaba un sistema operativo que permitiera acceder de forma directa al hardware de la laptop y desgraciadamente Windows XP no es esa clase de sistema operativo. Linux si permite mayor control, pero también me interesaba poder correr aplicaciones que ocupan de DOS en modo real. Existe Dosbox, pero hice unas pruebas con unas aplicaciones que hicimos mi amigo Dash Bandit y su servidor a principios del milenio y por desgracia dichas aplicaciones no funcionaron en Dosbox. Y si bien no son aplicaciones increíbles o que no podamos replicar en la actualidad, si representan parte importante de la historia personal de su servidor.
Así pues, decidí instalarle a esa laptop Windows 98 SE, el último sistema operativo en soportar DOS en modo real, ya que a partir de Windows Me se emplea una capa de emulación que si bien le brinda mucha estabilidad a los programas DOS (que son propensos por su naturaleza a trabar las computadoras si presentan algún error), se pierde muchísima compatibilidad. La capa de emulación de DOS en sistemas NT además no suele tener buen rendimiento, ya que utiliza muchos recursos del sistema (uso del CPU siempre al 100%). Recuerdo en alguno de mis empleos de juventud que un servidor HP Proliant con un Pentium 4 y Windows Server 2003 se doblegaba con ejecutar solo dos sesiones de SAE (Sistema de Administración Empresarial) en su versión DOS (corriendo sobre escritorio remoto y NETBIOS). Realicé algunas pruebas con TAMEDOS y el rendimiento mejoró bastante (se llegaron a correr 22 sesiones de SAE con toda fluidez), sin embargo ese es un programa comercial y al terminar el periodo de evaluación se tuvo que volver al caos y la lentitud X_x.
Windows 98 utiliza tanto el kernel de MS-DOS como su propio kernel y ambos le brindan al usuario prácticamente acceso sin restricciones a los recursos de hardware de la máquina, pues todos los usuarios tienen privilegios "SYSTEM" (el nivel de privilegios más alto, aún por encima de "Administrador"). Esto representa un arma de dos filos, pues si bien se pueden aprovechar todos los recursos de forma directa y sin sobrecarga, si se hace mal uso de los apuntadores a memoria se pueden trabar programas, corromper el sistema operativo o incluso dañar hardware. En versiones posteriores de Windows se incorporaron varias capas de abstracción para mitigar los posibles peligros del mal uso de los recursos y como medida ante ataques de virus destructivos (que en aquella época existían y representaban pérdidas cuantiosas para las empresas y los usuarios hogareños).
Instalar Windows 98 es una tarea que realizaba de forma cotidiana en la segunda computadora personal que llegó a casa, una poderosa AMD K6-2 a 450 Mhz, con portentosos 64 MB de RAM PC100, inmensos 10 GB de disco duro (Samsung IDE a 5400 RPM) y como no podía ser de otra forma una tarjeta madre PC-Chips M598LMR (socket 7) con el siempre bien recordado video integrado SiS530. Todo un arsenal de "alto poder" para encarar el inicio del nuevo milenio, pues esa computadora llegó a casa en septiembre del año 2000 (ya estaba algo defasada para esa época) y por ella se pagaron unos módicos $10,500.00 MXN, que según la calculadora de inflación equivalen aproximadamente a $21,268.00 MXN de hoy en día (X_x). Es decir, o la tecnología en esa época era extremadamente cara, o "le vieron la cara" a mi padre (ya que uno de sus conocidos fue quien nos vendió esa computadora) o ambas.
Las reinstalaciones cotidianas del sistema operativo obedecían a varios factores como el hecho que ni mis hermanos ni su servidor dominaban el uso de la computadora, por lo que era común borrar archivos, cambiar configuraciones cruciales, instalar "companions" y barras innecesarias en el navegador de internet o simplemente se infectaba con algún virus (que lograra burlar al infalible Trend Micro PC-Cillin) y el sistema operativo se tornaba lento e inutilizable. Con el paso de los años y del uso constante del sistema su servidor terminó por adquirir un buen nivel de manejo y configuración de Windows 98, por lo que es un sistema con el que me sentía cómodo para trabajar y desarrollar aplicaciones.
Los tiempos cambiaron y la masificación de las memorias USB (las cuales requerían cada una de un driver para funcionar en Windows 98) comenzaron a lastrar la funcionalidad del sistema operativo. El salto a Windows XP lo tuve que dar ya bien entrado el año 2005, cuando el audio integrado de la computadora que tenía en aquél entonces (una Celeron Tualatin a 1.2 Ghz) decidió perecer y tuve que comprar una tarjeta de audio PCI. Opté por la gama de entrada de SoundBlaster, la Audigy SE y dicha tarjeta por desgracia no contaba con drivers para Windows 98. Así que la alternativa era clara, actualizar y tener audio de buen nivel (sin llegar a ser maravilloso) o aferrarme a Windows 98 y vivir sólo con los "beeps" de la bocina integrada. En la mudanza a Windows XP se perdieron varias cosas, como la capacidad de manipular el puerto paralelo desde MS-DOS, el propio MS-DOS y el soporte para muchos modos gráficos "especiales", la capacidad de masterizar juegos auto arrancables de Dreamcast desde la linea de comandos o incluso el rippear los juegos de Dreamcast conectando la consola a través de su puerto serial al puerto paralelo de la computadora usando el diagrama y las aplicaciones de la página de jj1odm.
Echando un vistazo al pasado noto que la interacción que muchas personas tuvieron con Windows 9x (95, 98, y 98SE), las experiencias y recuerdos de uso van desde el desagrado total, el drama absoluto y exagerado, hasta la nostalgia cegadora e irreal. Para su servidor la experiencia con Windows 98 fue sumamente grata y enriquecedora, ya que con ese sistema operativo me tuve que educar en las artes (magias y brujerías X_x) de la informática, la computación y hasta la electrónica. Fueron muchos años de aprendizaje en los que por supuesto se tuvo que lidiar con conflictos de hardware, reinicios, trabadas esporádicas (que solían ocurrir en los momentos menos oportunos) y fallas de hardware. Entre las fallas que recuerdo con más claridad fueron las dos ocasiones que el modem telefónico (en aquél entonces la única forma de conexión a internet con que se contaba en casa) se descompusieron. Las unidades de CD tampoco eran de lo más fiable en esa época (y menos aún si eran de marca Creative o Aopen), así como las disqueteras (que sufrían de uso rudo a causa de los trabajos escolares que se tenían que entregar en disquetes) y la vez que mi hermano insertó al revés una memoria USB y se estropearon tanto los dos puertos USB "onboard" así como el conector PS/2 para ratón (por lo que se requirió de la compra de un ratón USB y una tarjeta PCI con 4 puertos USB 2.0).
Recientemente leí el artículo de Nostalgia Nerd, cuenta su "drama" (bastante exagerado) de la instalación y puesta a punto de Windows 98 en una máquina Dell de la época de la Presario 2510A. De dicho artículo he podido rescatar los parámetros de instalación para evitar la detección del BIOS ACPI (que son SETUP /p i) y también que el hecho de haber vivido en la época en que las cosas eran vigentes no te convierte automáticamente un experto en ellas. Actualmente hay mucha información en Internet, muchísima más que cuando Windows 98 estaba vigente, pero la información técnica y especializada sigue siendo tan difícil de conseguir como hace 17 años. A diferencia de Nostalgia Nerd, yo tengo un uso en mente para el sistema Windows 98 en la Presario 2510A y además no era simplemente un usuario de "a pie" de aquel sistema, ya que lo empleaba de forma activa para desarrollar, experimentar, configurar, reconfigurar, exprimir hasta el último MHz de rendimiento y tratar de sacarle todo el provecho al limitado hardware con el que contaba en esa época.
Llegó el momento de ponerse manos a la obra, por lo que opté por emplear el disco duro que mi amigo MaxClowReed me cedió, un IBM Travelstar de 6 GB de capacidad y 240kb de sectores erróneos X_x. Dicho disco hace sonidos muy raros al trabajar, pero aún es utilizable. Procedí a realizar la preparación del disco con FDISK, crear una sola partición, formatear la partición con el revolucionario sistema de archivos FAT32 (sin compresión) y proceder a la instalación (tecleando INSTALAR /p i).
De forma perfectamente inesperada, no hubo mayores sobresaltos durante la instalación. No hubo queja alguna de los sectores erróneos del disco duro ni de los 1024 MB de RAM (de los cuales se comparten 64MB con el video integrado). Sólo hubo una parte de la instalación en la cual el sistema dejó de responder, pero siguiendo la instrucción que el mismo instalador coloca, bastó con reiniciar el equipo para que la instalación procediera hasta llegar al escritorio de Windows.
Como era de esperar en una computadora manufacturada años después de la creación del sistema operativo, el sistema no se contaba con los drivers necesarios para el video, el sonido y la red. Acá surgió un problema, pues la Presario 2510LA no aparece listada en el centro de asistencia y descargas de HP. Busqué en Google información sobre los controladores o los dispositivos con los que contaba la computadora, pero siempre me topaba con información inconsistente o de plano falaz de sitios que te prometen un driver pero en realidad desean que descargues e instales bloatware, malware y unos companions mal disfrazados de utilerías X_x.
Una técnica para poder identificar los dispositivos que requieren de controladores es ingresar al administrador de dispositivos, identificar los dispositivos que tienen un ícono de advertencia (indicando que no se ha encontrado controlador para dicho dispositivo). Se ingresa a las propiedades del dispositivo y se anotan los valores VEN (Vendor) y DEV (Device). Esos valores se pueden buscar en alguna base de datos o Google para identificar el dispositivo y buscar (con suerte encontrar) su controlador. Todo lo anterior en sistemas Windows NT... en Windows 98 el Administrador de dispositivos no da dicha información X_x. Por fortuna se puede recurrir a presionar Win+R y teclear "msinfo32" (sin las comillas) para acceder a la aplicación de información del sistema, navegar por las categorías de dispositivos y poder rescatar los preciados VEN/DEV de nuestros dispositivos.
Una vez identificados los dispositivos, comienza la búsqueda de los controladores. Idealmente podemos encontrar los controladores en la página de la marca de la computadora o en la página del fabricante de cada uno de los dispositivos. Pero como vivimos en el planeta Tierra (y no en el planeta de la Fantasía y la Eterna Felicidad) eso no ocurre y tenemos que realizar labor detectivesca para encontrar pistas e indicios del último paradero conocido de nuestro ansiado controlador. Además debemos ser hábiles para evitar los peligros de los rincones más remotos y los callejones oscuros de Internet, donde nuestra búsqueda nos llevará casi con seguridad. Debemos evitar traernos algún malware o virus que nos puede echar a perder tanto la búsqueda como el dispositivo que estemos utilizando para hacer la labor de investigación. Además debemos recordar que en aquél entonces los drivers eran propensos a tener errores o a ser modificados por terceros (pues en esa época no existía el firmado digital de controladores), por lo que un driver rezagado o adulterado en lugar de darnos soluciones nos puede dar más problemas de los que teníamos al principio. En muchas ocasiones los indicios nos pueden llevar foros zombie y a páginas que parecen homenaje a las ligas rotas X_x. El Internet Archive nos puede llegar a sacar del apuro, si contamos con la fortuna de que las ligas que hoy se encuentran rotas estén respaldadas en la Wayback Machine.
Les puedo recomendar que traen de localizar el nombre del archivo del instalador del driver que requieren, y centren sus esfuerzos en localizar ese archivo. Así mismo, si encuentran un archivo que aparente ser el driver recomiendo que revisen el interior del archivo INF y busquen los valores de VEN y DEV de su dispositivo dentro de ese archivo. El archivo INF contiene la información de los archivos que se tienen que copiar al disco duro y los valores de registro que se tienen que escribir. Cada dispositivo se encuentra identificado en el registro de Windows con sus respectivos valores VEN y DEV (ya que es así como los identifica el msinfo32 para hacer su base de datos). Si no aparecen el VEN y DEV de nuestro dispositivo en el INF, entonces esos archivos no son el driver adecuado y no nos servirá.
Si de pura casualidad tienen una computadora Compaq Presario 2510LA pueden sentirse con la libertad de regalármela n_n. ¡Es broma! Acá les acerco los controladores de audio, video y red que me han funcionado para Windows 98 SE.
Driver para video Radeon IGP345M.
Driver para audio ALI M1535+.
Driver para red National Semiconductor DP83816AVNG.
Después de instalar los drivers adecuados en la computadora tuve sonido, video y red funcionales. Dejé de lado el controlador del Firewire, pues no cuento con dispositivos que utilicen esa conexión y también el del modem telefónico, pues ya tampoco cuento con línea telefónica. Me dispuse a personalizar la apariencia de Windows, lo cual se ha perdido en las versiones recientes del sistema operativo. Ahora la moda es que todo sea plano, aburrido, gris y minimalista, tanto en interfaces como en diseños. Y a mi modo de ver, incluso esos adjetivos ya se pueden aplicar también a muchas de las cosas actuales como teléfonos celulares, autos, edificios, computadoras y hasta personas X_x.
Una vez colocada la interfaz a mi gusto, experimente el primer "lapsus" de Windows, pues la ventana de selección del tema (Plus!) dejó de responder y se quedó como una rectángulo vacío que permaneció así hasta el reinicio de la computadora. Para pasar la información al disco duro me auxilié de un adaptador de IDE44 a USB, pero por fortuna la comunidad se ha esforzado por impulsar a Windows 98 en la medida de lo posible y han desarrollado tanto "Service Packs" no oficiales, como otras utilerías, destacando el soporte para memorias USB, controladores genéricos, capas de compatibilidad para sistemas de archivos más avanzados e incluso parches de kernel en tiempo real para poder ejecutar aplicaciones modernas (pensadas para Windows NT).
Una vez concluida la instalación intenté probar algunos de los programas que me interesaba rescatar. Todos funcionaron a la perfección, por lo que la configuración fue exitosa.
Y ustedes, ¿Ya desfragmentaron su registro, ajustaron su HIMEM.SYS y su AUTOEXEC.BAT?
Estamos en contact!!